Cumpliendo un sueño...

martes, 19 de agosto de 2014

¿Mereció la pena?

Tanto tiempo esperándote,
tantas noches en vela,
tanto tiempo dedicado en pensarte,
en recordar tu sonrisa,
¿dónde quedaron?

¿Recuerdas mi voz?
¿Recuerdas mis ojos?
¿Me puedes hacer sentir
que mereció la pena todo
lo que te ofrecí?

Sólo espero verte
llegar un día de estos,
que toquen la puerta
y descubrirte detrás,
con esa sonrisa, esa mirada,
esas manos que cuando
cogen las mías me hacen estremecer.


Sólo me pregunto si volverás.

viernes, 16 de mayo de 2014

Recuerdos... sólo quedan recuerdos...

Labios que besan labios,
ojos con miradas vergonzosas,
y yo los miro llorando desde
el balcón solitario en aquella
triste y oscura alcoba.

Recuerdos que son pasado,
risas que son olvido,
y aquella mirada penetrante
que murió contigo.

Sólo me queda el silencio,
y el dormitorio vacío,
ya no queda más que soledad,
y la llamada anunciadora
de tu trágico destino.

Aún paso noches en vela
con tu imagen grabada en los ojos,
como si quisieras volver a la vida
por mis recuerdos ya borrosos.

Sólo me pregunto por qué te marchaste,
por qué me dejaste en el balcón solo,
mirando dulces besos y miradas,
mirando recuerdos ya borrosos.

sábado, 3 de mayo de 2014

Sólo preguntas.

No se qué ocurre,
ni qué se me pasa
realmente por la cabeza,
los pensamientos van y vienen,
las ideas a mi cabeza apedrean.

Sentir al corazón querer salir del pecho,
como un pequeño colibrí batiendo las alas,
querer tranquilizarme y no conseguirlo,
estar echa un lío de pensamientos, palabras.

¿Por qué tengo tanto miedo?
¿Por qué pienso tanto en los demás?
¿Por qué les tendría que decepcionar a todos
por hacer algo que tal vez deseo, pero que
reconozco que de mi no caben esperar?

¿Tan cruel sería hacer lo
que las circunstancias me traen?
¿Realmente pienso en lo que quiero yo?
¿Por qué me asfixio entre mis lágrimas?
¿Por qué estoy llorando con el corazón?
¿Por qué siempre hago feliz a la gente,
aunque a la vez me haga infeliz yo?
¿Es egoísta pensar en uno mismo?
¿Es egoísta decepcionar a los demás?
¿Es egoísta aprovecharme de su confianza?
¿Es egoísta tan sólo por mi mente el pensamiento cruzar?

No entiendo lo que quiero,
ni mucho menos que debo hacer,
sentirme amarra por mis miedos,
no saber si estar quieta, o correr,
si dar un paso adelante, o permanecer
simplemente en pie,
no se si volver un paso hacia atrás,
no se si debo hacer lo que mi mente cree.
No se si guiarme por mis deseos,
no se si hacer caso a la razón,
no se si guiarme por lo que creo bueno,
no se si realmente la que piensa soy yo.

Noches en vela, vueltas que la sábana contempla,
las estrellas son testigos de estos pensamientos
que ahora mismo a mi alma atormentan,
pero realmente me siento sola frente a ellos,
frente a esos miedos que me declaran la guerra.

No se si llorar o aguantar las lágrimas,
no se si dejar la mente en blanco y buscar una solución,
odio pensar en lo que la sociedad pide de mí,
odio decepcionar a las personas que quiero
por dar pasos sólo pensando en mí.
¿Aunque realmente hago lo que yo quiero?
¿O sigo buscando la felicidad de los demás?
¿Sentiré algún día paz? ¿Sosiego?
¿Es egoísta pensar que personas que quieres
pueden que se estén aprovechando de mí?
¿Es miedo y desconfianza lo que me frena?
¿Es miedo a la decepción lo que me atormenta?
¿Es miedo a crecer lo que realmente me envenena?
¿Es miedo a no poder volver atrás y sentir una posible condena?
¿Es miedo a mirar hacia delante y a experimentar la vida

por descubrir que aún me queda?

domingo, 27 de abril de 2014

Siempre se puede luchar.

Cuando la vida golpea,
y sientes desfallecer,
cuando la vida traiciona,
y ves caer tu mundo a los pies,
cuando la vida se ríe,
y te humilla una y otra vez,
cuando la vida te roba
y ves impotente lo cruel que es.

Ser fuerte no es optativo,
es obligación, determinación,
para poder seguir en esta lucha
que empieza al latir por primera
vez nuestro pequeño corazón.

Años andando y andando,
sin poder parar a descansar,
sin poder mirar ni tan sólo
un segundo al pasado, volver la vista atrás.
Ni un segundo de calma, de paz,
pues quedarse rezagado es un trampa,
una trampa de la que tal vez no salgas jamás.

Pero hay que ser valiente,
mirar a la cara al presente, al futuro,
mirar sin miedo a la incertidumbre,
a cualquier pequeño murmullo
de esa cosa tan extraña como es
la superación, la idea de vivir seguro,
de poder vencer la batalla, de poder
sentir un segundo de descanso,
de poder respirar profundamente,
de poder tener por un momento
un alma tranquila, sin miedo que amedrente.

Mirar la vida como un juego,
donde ganar o perder depende
de la única vida de la que dispones,
pensando que lo siguiente que verás
es un horrible y cruel game over,
donde perder tarde o temprano
se convierte en algo planeado
y de lo que tu mente ya dispone.

Pero jugar es divertido,
y tener miedo no tiene
valor ni sentido, porque
vivir encerrado es de cobardes,
y la vida sólo ofrece algo
a los valientes de sangre.

Cuando la vida golpea,
y sientes desfallecer,
cuando la vida traiciona,
y ves caer tu mundo a los pies,
cuando la vida se ríe,
y te humilla una y otra vez,
cuando la vida te roba
y ves impotente lo cruel que es.
Cuando la vida te tiende una mano,
nunca la dejes caer, no desperdicies
oportunidades, nunca te dejes vencer.

sábado, 26 de abril de 2014

¿Para qué las palabras?

Si sabes que te amo,
cariño,
¿para qué usar palabras?
Si sabes que te amo,
mi vida,
para que pronunciarlo
con la garganta, ¿si mis ojos
por si solos ya hablan?

martes, 22 de abril de 2014

Un canto a la libertad.

El color blanco canta
sentimientos de libertad,
pero pocas personas oyen,
las voces de la paz.

Muchas veces me pregunto
si de verdad existirá,
o si, por el contrario, es
sólo una leyenda más.

Angustia, hambre,
desolación, hostilidad,
sentimientos que enferman
a la pobre humanidad.

Y la paz podría ser la gran
cura para esta enfermedad,
pero nosotros la enterramos bajo
cenizas que con el viento se van.

Ceguera intencionada,
no queremos ver más allá,
preferimos no ver nada,
preferimos simplemente ignorar.

Sólo espero que algún día
la leyenda se haga realidad,
y que la paz cubra el mundo
y con él a toda la humanidad.

Mientras tanto siempre
podré soñar, soñar con un
mundo más justo, mas humano,
con un mundo de verdad.

viernes, 18 de abril de 2014

No quiero calor.

Hoy está nublado
y la calle solitaria,
los pájaros no cantan,
el calor parece recuerdo
ya lejano y extraño.

Lejano y extraño
como eras tú,
que llegaste a mi vida
sin preguntar, de golpe
y sin llamar; sin poder
pedirte explicación
entraste en mi corazón,
sin decir ni una palabra
me desarmaste el alma
y te marchaste dejándome
sola y destrozada.

Pero eres cruel, mezquino,
no por aparecer sino por
tu huida sin sentido,
que te lo di todo, sin
recibir nada verdaderamente
a cambio, pues me jurabas
promesas que junto al
calor se marcharon.

Qué es el amor sino un
dolor oculto, como lo
describía Celestina bajo
la pluma de aquel escrito
tan culto; el amor es cruel
no por su llegada, sino
porque arrasa con los
corazones por donde
sus pasos siempre pasan.

Por eso me da miedo
salir esta vez de casa,
porque mi camino es
incertidumbre, y quiero
tranquilidad y paz
en mi pobre alma,
no más sufrimiento,
quiero un poco de calma,
quiero tenerte lejos,
quiero vivir sin tormento,
suplicio que es calmado
con el hielo del invierno.








sábado, 29 de marzo de 2014

MANIFIESTO: En contra de TODO.

Sentimiento de impotencia,
rabia, desesperación,
intentando luchar contra
corriente, contra el propio
hombre que asola nuestro
pequeño y único rincón.

Actos violentos, crueles,
todo por vanidad,
nadie se para a pensar en
lo que realmente hace,
solo piensan en que
su cartera siempre
estará rebosante.

Rebosante de dinero
sucio, basura, ¿por qué
la gente no se quita
la venda y se asoma
a la realidad oscura?

¿Tal vez por miedo?
¿Tal vez sea la vergüenza?
Pero sólo se que nos
estamos cargando nuestro
planeta, el único lugar
que la gente contempla.

El único lugar al que
podemos llamar hogar,
y lo destrozamos por
pura basura que según
algunos nos traerá
aquello tan ansiado
conocido como felicidad.

Pero todo esto me hace
pensar, y mirar hacia
fuera con pura incredulidad.
¿De que sirve tener dinero
en un lugar en el que pronto
no se podrá habitar?

La sociedad nos considera
locos, paranoicos, delincuentes,
por defender nuestra tierra
con garras y dientes.
Que nos da igual lo que se
nos diga, sabemos lo que
queremos y lucharemos
por defender lo poco que
en este lugar queda de vida.

Porque cada uno elige
quién quiere ser en la vida,
yo ya lo sé, y estoy en contra
de esa caza repulsiva, matando
animales por un poco de grasa
para que intentes hacer que
por tu cara no pase la vida.

Pues quiero que quede
algo bien clarito, si hay
algo seguro es que todos
tenemos un mismo destino.
Y lo único que quedará
de nosotros, nuestro único
legado en este lugar al
que llamamos hogar,
es lo que hemos hecho y
quienes hemos sido, no
el asqueroso dinero
que se pudrirá contigo.





¿DE VERDAD QUÉ ES ESTO TODO LO QUE QUEREMOS? ¿VAMOS A HACER COMO
SI NADA OCURRIERA? ¿QUEREMOS SER CIEGOS A PROPÓSITO? ¿AQUÍ SE ENCIERRA 
LA MORAL DEL HOMBRE? PUES SI ES ASÍ, EL SER HUMANO HA FRACASADO.

viernes, 28 de marzo de 2014

La palabra nos hace libres.

Eres mundo que me cohíbe,
al entrar me desnudas sin querer,
dejas libre a mi alma errante,
dejas a mi corazón crecer.
Camino descalza por tu calidez,
no hay frío entre tus brazos,
no hay miedo, nada a lo que temer.

Te amaba incluso antes de saberlo,
un amor que despertó de pronto,
-sin querer-.
Desde entonces no puedo abandonar
este maravilloso y luminoso mundo.
Mundo de tinta y de blanco papel.

Mi alma escribe lo que siento,
mi corazón perfila mis pensamientos,
consigo sacar mis tormentos y secretos,
correr libre por el mundo donde la palabra
es una dulce y agradable corriente de viento.

Poder contar cosas que algún día ocurrieron,
o poder crear hechos que duermen en mis ojos,
mi cara, mis pies, mi cintura, mi pelo.
Crear lágrimas, crear secretos, crear ilusiones,
crear todo tipo de horribles tormentos.

Ese es el mundo del papel y la tinta,
al que muchos acuden para buscar llantos, risas.
Un mundo tan real como la vida misma,
así es la palabra que perdura en el tiempo
más que cualquier guerra, noble, artista.

Dichosos son los que entrar saben,
dichosos son los que a escribir se dedican,
porque son personas libres, porque la palabra

tiene poderes que a todos se les brida.

Siempre igual

Si no me hablas no te hablo,
Si tú no te acercas, ¿por qué
he de hacerlo yo?

No es más que una tontería,
problemas de críos,
pero una gran desgracia
para mi pobre corazón.

¿Por qué no puedo ser
como todo el mundo?
¿Por qué no pueden
mis sueños hacerse realidad?

Eso mismo me pregunto
cada uno de mis días,
días que pasan sin
una sola respuesta volar.

No te culpo de mi desgracia,
pues culpable no eres.
Eres sólo víctima de tu ignorancia,
y no responsable del hecho de
que no me quieres.

Sencillamente me resigno,
aguanto esta situación,
dolor, puede que pena,
pero como a todo, algún
día le diré adiós.

Esto son etapas de la vida,
supongo, que todos hemos
de pasar, pues más que yo
sufrir, recibo lo que mi
pobre corazón cabía esperar.


sábado, 22 de marzo de 2014

Inocencia...

Aquí dejo un poema que escribí hace ya un tiempo. Espero que lo disfrutéis... como niños :)

INOCENCIA

¡Ay, dichosa inocencia!
Bendita tú, mundo de permanente
belleza, despreocupación,
sueños y delicadeza.

Hogar para almas soñadoras,
puras, para aquellas en las que
la despreocupación aún dura.

Dichosa infancia, tan lejana y a la vez
tan melancólicamente cercana,
que aún me veo tras la puerta entornada
en mi sala de juegos bajo la gran ventana.

Pinceles sucios y ceras gastadas,
todo esparcido en mi mundo
de tan inocencia delicada.

Ver el mundo con curiosidad plena,
preguntar qué es aquello y por qué es así,
ansia de saber, todo era nuevo para mí.

¡Ay, dichosa inocencia!
¡Mi alma te busca y
no te encuentra!

Me dejaste hace tiempo
sin decir palabra, sin avisar,
dejaste sin vida a mis muñecas,
a mi bola de nieve de cristal.

¡Ay, bendita infancia!
¡Cómo ansío volverte a encontrar!
Aunque sé perfectamente que hace
mucho tiempo que te dejé atrás.

Guarda mis sueños,
mi dulce felicidad,
mis recuerdos y
mi pura ingenuidad.

Guárdalos bajo llave,
no los dejes escapar,
pues yo ya lo hice

al dejarte a ti marchar.

domingo, 2 de marzo de 2014

Invierno.

Aún recuerdo aquella tarde de invierno, tu sentado a mi lado, los dos mirando al frente. Hablábamos de todo y de nada, teníamos todo el tiempo del mundo mientras la gente pasaba a nuestro alrededor con ese ajetreo asfixiante, nosotros nos mirábamos tímidos y reíamos con inocentes mentalidades.

-Te quiero-.Me decías con aquella sonrisa radiante.-Habría querido decirlo antes, pero al final tu te me adelantaste.- Seguías diciendo con tu dulce mirada que tanto me gusta.

-Yo pensé que la había fastidiado-.Respondí tímidamente.-Pero lo tenía que hacer.

Pasaban las horas volando, como palomas con sueños bajo sus párpados. La noche se ponía, el barullo de la gente seguía estando, pero solo era un murmullo de fondo, en el fondo de aquel bonito escenario. ¿Quién dice que el mejor amor es el de verano? ¿No era aquel de invierno más bello que cualquier otro de la época estival del año?
Años de felicidad que pasaron volando, ahora únicamente recuerdos, espejismos tallados en mi corazón, duraderos como el más duro acero, una vida llena de dicha y ensoñación.

Es triste pensar en el paso del tiempo, años de juventud que ya no volverán, la estación estival se está acabando, y el otoño comienza a clarear, pero no siento pena por estos años que han pasado, por esa vitalidad que ya no existe en mí, pues mi amor no es de verano, sino de invierno que todavía a de venir.

Ser ciegos a propósito.

Hace poco, una profesora nos hizo pedir algo a Dios y dar gracias. Yo no me considero nada religiosa, bueno, no lo considero porque verdaderamente no lo soy, pero por pedir algo no pasa nada, y por dar gracias tampoco, aunque no tiene por qué ser a Dios, tal vez sea más efectivo darle las gracias a nuestra madre o padre, o tal vez a nuestro hermano mayor, a la vecina, a un profesor, a un amigo. Nos ha tocado vivir en un mundo bastante duro, son tiempos difíciles, por eso creo que más que nunca se necesita algo de humanidad, un parón en esta ajetreada sociedad que nunca descansa, donde el tiempo es dinero; una sociedad llena de avaricia y envidia, una sociedad sin dignidad, donde todas las personas tienen un precio, donde da igual lo que se tenga que hacer por llenar un poco más la cartera, ¿para qué queremos la dignidad? ¿Acaso tener dignidad me favorece en los negocios? ¿A comprar un coche más? ¿A tener una casa en primera fila de playa? La humanidad es así de triste.
Por eso me pareció buena idea pedir algo. Un chico pidió por que su abuelo se pusiera bien, otros pidieron por motivos más o menos similares, y a mi sólo se me pasó una frase por la mente, sólo pedí que el mundo se arreglara. Da pena ver el telediario, donde sólo se anuncian guerras, un mundo que se empobrece para que unos pocos se bañen en dinero, machismo y violencia de género y por intolerancia a los homosexuales, racismo, países con muros a su alrededor, gente pasando hambre, niños sufriendo calamidades, nuevas catástrofes por el cambio climático, menos tolerancia a la libertad de expresión,... En fin, todos sabéis de que hablo, es la misma historia de siempre, nada nuevo, nada cambia, todo sigue en su sitio.
Esa es la verdadera pena, cuando salgo a la calle a veces me da la sensación de que todo es una farsa, de que esa tranquilidad que rodea mi vida es sólo aparente, que todo no es tan sencillo como lo veo. Eso me lleva a la conclusión de que una gran ignorancia envuelve nuestras vidas, pero, ¿yo qué culpa tengo de que la ignorancia sea el saber del hombre? Aparentemente ninguna, o eso a veces quiero creer, que yo no puedo hacer nada para salvar al mundo, que no soy nadie para ni siquiera intentarlo, pero no es verdad, dar la espalda a todo sí que es mezquino, hacer como que no pasa nada, que todo el mundo es feliz, ser ciega a propósito, eso sí que es un delito moral, un delito que nadie ha escrito y que nadie penaliza, pero así es la humanidad, así somos las personas, es así todo de triste.

Por eso, a quien lea mis palabras, no te creas insignificante, todos podemos decidir, actuar según como veamos correcto, todos podemos contribuir a que nuestro planeta sea un poco más humano. Sólo nos hace falta confianza y decisión.
Porque entre todos podemos cambiar el mundo.

domingo, 5 de enero de 2014

Una mañana de reflexión

Qué caprichosa que es la vida ¿verdad? Algunos piensan que es la suerte, otros el destino, una coincidencia, o la decisión de un amargo camino. Las cosas pasan, y nosotros nos empeñamos en buscarles sentido, un motivo, algo a lo que culpar, un lugar donde llorar tranquilo. En ocasiones yo misma me pregunto si la vida es una continua prueba que nos hace sacar lo que llevamos dentro, si así es la única manera de conocernos a nosotros mismos, que tal vez viviendo, sea el único modo de seguir adelante, o si por el contrario, de sólo andar en círculos. Confusión, nostalgia, una sorpresa o un suspiro, sentimientos que te ponen el bello de punta, el placer de una leve caricia, la pasión de un beso correspondido.

Miedo frente a la diferencia, ¿por qué ser como aquellos que parecen sacados de una fabricación en serie? ¿Por qué seguir modas, comportamientos, estilos de vida? ¿Por qué aparentar? ¿Por qué no ser uno mismo? Es tan difícil la decisión... ¿seguir los deseos de los demás o los de ti mismo? Buscar la aceptación, vivir rodeado del mundo, pero a veces ser igual aburre, porque la diferencia es lo que nos hace libres, expresar nuestra persona, vivir sin nada que nos aflige.


Tengo claro que la perfección no existe, ¿y para qué decir que la perfección está en las imperfecciones de cada uno? ¿Tanto nos duele aceptar la imperfección? ¿Acaso la vida sería más interesante sin la superación? ¿Sin intentar ser mejor? ¿Subir cada día un pequeño escalón de esa escalera que llega a nuestro propio corazón? Yo no me considero alguien superficial, ni me dejo llevar por la gente, ni las modas, ni los programas a los que todos están enganchados, no soy chica de ciudad ni tampoco me llevo bien con toda la gente, y la verdad, tampoco lo pretendo, ¿para qué intentar ser alguien que ni yo misma comprendo?


sábado, 4 de enero de 2014

Por ti

Alma valiente que vives vagando
por calles estrechas,
por sueños truncados.

Tu alma ingenua no alcanza
el grado a conocer la razón por
la que sufres tan triste descuidado.

Solo sabes que vives bagando
por calles estrechas,
por sueños truncados.

Buscas un mundo donde poder
vivir a salvo, busca un lugar
donde poder ser al fin amado.

Mientras, corazón errante,
ensangrentado, tus pasos son los
minutos que tu alma lleva esperando.

El camino, tan desconocido,
no te da pista alguna sobre
cuál sera tu destino.

Solo sabes que vives bagando
por calles estrechas,
por sueños truncados.

Albergas la esperanza de sentir
aceptación en algún lado, y esperas
impaciente a que tu deseo sea escuchado.

En ocasiones te preguntas si hay alguien
realmente a tu lado, o si vagas solo,
desprotegido, por este mundo para ti desconfiado.

No estás solo, pues escribo estas
pobres lineas para todo aquel que por
el maltrecho camino errante camina.

Encontrarás tu lugar, pobre alma marchita,
que solo sabes que vives bagando

por calles estrechas bajo noches infinitas.

viernes, 3 de enero de 2014

Soñando

¿Dónde estarás?
¿Qué estarás haciendo?
Tal vez contemples
el oscuro cielo,
tallado de estrellas
en el gran misterio
que es el firmamento.

Quizás un libro estés
ahora mismo leyendo,
inmerso entre sus páginas,
bebiendo de todo aquello
que contenga dentro.

A lo mejor ahora duermes,
sumido en un profundo sueño,
colmado de seres extraños
que pueblan tus peores
pesadillas o tus mejores sueños.

O tal vez estés pensando
en que ahí fuera hay
alguien que te está esperando,
y te preguntas qué estará
haciendo ahora, y si como
tú también estará soñando.

Ojalá sueñes conmigo,
y algún día te encuentre,
que nuestros dos caminos
se hagan el mismo,
y saber por fin quién eres.

Quién serás y que
estarás haciendo.
Me pregunto si serás
mi mayor regalo,
o mi peor tormento.
Pero ya se verá,
sólo hay que darle
tiempo al tiempo,
pues la vida es fugaz
y se pasa como un soplo
de aire que se te escapa

de entre los finos dedos.

jueves, 2 de enero de 2014

Junto al balcón

Ya no hay palabras,
espacios de silencio
pueblan las largas
horas que juntos
pasamos las noches
de plena oscuridad.

La luna tímida asoma
por un fino resquicio
de la ventana,
nos observa mudos,
con las palabras atragantadas
ver las horas pasar.

¿Qué nos ha pasado?
Te preguntas cada noche
después de nuestro
escueto y solitario adiós.
¿Qué nos ha pasado?
Eso mismo me pregunto yo.

La distancia que nos separa
no es más que una
gruesa pared etérea
fruto de nuestro
deshilachado amor.
¿Qué nos ha pasado?
Eso mismo me pregunto yo.

Un suave soplo
apagó la vela del amor,
ya no hay nada entre nosotros,
no más que un oscuro
vacío que ambos alimentamos

cada noche junto al balcón.

miércoles, 1 de enero de 2014

Deseos

Creo nunca haber sentido
tal cosa por alguien, y
cuando observo el fracaso
ni la lágrima acude para
simplemente acompañarme.

Deseos vanos porque
algún día me hables,
que de esa boca al menos
una palabra escape,
que al menos sienta que,
aunque sea poco,
mi existencia te importe,
y sin embargo vago
con la incertidumbre
por un mundo que se rompe.

Que se rompe por ti,
que aún así no te culpo
de tus actos...
Al ser insignificante,
pequeña, como normal
soy, normal vago,
como estrella errante
que viaja en soledad,
a la espera de que algún día 
te acuerdes de mi nombre
simplemente pronunciar.

Que con una sonrisa me
mires un segundo al pasar,
y me harás la persona más
feliz que ha poblado y
poblará el mundo jamás.

Malditos complejos que
me atormentan sin cesar.
No me dejan actuar,
en este mundo donde sólo
el valiente de conseguir
lo que quiere es capaz.
Baja autoestima, rechazo
a tu personalidad, tormentos
de mi persona, todos ellos
me acompañan por el viaje
que la vida nos da.

Y tú podrías ser un poco de
cura para mi pobre enfermedad,
pero la guardas bajo llave,
me vetas su alcance,
y sin saberlo mi impides
el avance, el caminar.

Pero no te culpo, pues
la vida así es, unas
veces se gana, otras se
pierde, y contigo perdí
incluso antes de comenzar,
en el momento en el que
mis ojos se posaron en ti,
y tú con tu dulce ingenuidad
te alejaste, sin saber que dejabas
a alguien de cuyo corazón 
junto a ti te llevaste.